Abre la puerta... Sal de ahí.
Sodoma y Gomorra no fueron sitios predestinados
solo para destrucción sino que llegando a tanta perdición, eran ineludibles
los resultados de sus efectos por sus
acciones negativas, y es también la comparación del estado de contaminación, error,
desorientación y depravación en todo aspecto del espíritu y cuerpo al que puede llegar a
caer una persona.
Por ello hay un llamado
para salir de allí, salvar el lugar que es el cuerpo, el alma y la vida
misma; por eso siendo cada persona la manifestación de nuestro Creador, él nos invita a cambiar y salir de toda
actitud con indicio de maldad. Dios nos llama con su dulce voz, en el
silencio de algún momento de nuestra estruendosa y afanada vida para ser libres, vivir con amor y respirar la felicidad.
Ya sabemos todos que tenemos errores que en algún momento nos desviamos y nos
equivocamos. Lo malo no es haber errado; Lo malo es quedarnos en el pecado
y en tal aceptación.
Cordial saludo y un
fraternal abrazo a todos quienes visitan mi página y se agradan del contenido,
también bendiciones a quienes por curiosidad o error entran, aunque no les
guste o desaprueben las reflexiones como señales y guías para un Camino de Luz,
mi Padre sabe de ellos y bendiciones
también tendrán.